Si estás pensando en internacionalizar tu franquicia y exportar tu modelo de negocio, estos consejos te ayudarán a tomar la decisión y accionar.
De las experiencias de empresas que han exportado sus marcas al mundo, de aportes de consultores y expertos surgen algunos consejos muy valiosos:
1. Analizar la viabilidad de dar ese paso internacional. Al plantearte salir al exterior, es muy práctico realizarse preguntas como las que siguen: ¿tengo un producto o servicio que puede ser competitivo en otros países? ¿En qué mercados funcionaría mi producto o servicio? ¿Dispongo de recursos financieros, técnicos y humanos para afrontar este proceso? ¿Puede mi franquicia asumir una expansión internacional? ¿De qué manera entraría en el país de destino: directamente, con socios locales…?
2. Tener un plan de internacionalización. Puede ser complicado llevar a cabo todos los análisis y la investigación necesaria para elaborar un plan de internacionalización. Sin embargo, ésta es una tarea obligatoria para expandirse con garantías, sin olvidar que es clave fijarse unos objetivos claros.
3. ¿Por qué no exportas antes de internacionalizar? Es una experiencia previa muy útil, como una especie de prueba piloto o examen del mercado, porque puede ayudar a determinar si dar el paso definitivo.
4. Definir los objetivos. Hay que tener muy claro por qué se quiere expandir la franquicia en el extranjero, cuáles son los objetivos reales del proyecto.
5. No tener prisa. La internacionalización es un proceso complejo, que no entiende de corto ni de medio plazo, sino que ha de implementarse con miras a largo plazo y de permanencia en el país de destino, sin asumir riesgos innecesarios.
6. Disponer de los recursos necesarios. Hablamos de recursos económicos, pues hay que tener músculo financiero para afrontar la internacionalización, así como rodearse de profesionales en la materia. En paralelo, hay que disponer de recursos técnicos en cuanto al control logístico a realizar cuando se introduce un producto o servicio en otro país.
7. Contar con un buen marketing e imagen de marca. Hoy no existen fronteras gracias a las nuevas tecnologías. A partir de aquí, es crítico poseer una web de calidad, con contenidos bien elaborados, de navegación sencilla y práctica, que aporte valor a la franquicia, así como a los productos o servicios que comercializamos.
8. Elegir el mercado de destino. Hay que definir de manera clara en cuál se quiere desembarcar, por proximidad, por afinidades culturales, lingüísticas, porque ha surgido una oportunidad, porque hay personas interesadas en introducir el negocio en su país de origen…
9. Análisis profundo y exhaustivo de ese mercado. Aunque existen diversas fuentes, estudios, informes… para obtener información sobre el país, lo más aconsejable y fiable es conocerlo in situ, lo que se traduce en asistir a ferias sectoriales con profesionales en internacionalización, saber cuál es la competencia, estudiar la legislación, las mejores ubicaciones y los hábitos culturales. Todo este proceso debe contar con el apoyo permanente de un experto nativo y con un amplio conocimiento del mercado. Pincha www.franquiciasfci.com para conocer consultores de franquicias en todo Iberoamérica.
10. Elegir la fórmula de entrada. La vía más práctica y efectiva es a través de socios locales, puesto que van a aportar el conocimiento preciso del mercado.
¡Teniendo en cuenta estos pasos, al fin podrás internacionalizar tu franquicia con éxito!
